¿Sabías que un simple cambio en la distribución de los muebles de tu hogar es fuente de energía positiva? Rodearnos de buenas vibraciones y positividad no sólo es cuestión de llevarlo a nuestra vida personal, también es imprescindible tenerlas en nuestra casa, armonizando el espacio y sentirnos bien. En este post, te vamos a explicar como atraer esta energía positiva a nuestro hogar a través del Feng Shui con una simple reorganización de los muebles.
Para quién no lo conozca, el Feng Shui es una técnica antigua que ya utilizaban los emperadores en China hace más de 5000 años para construir sus palacios. Una disciplina donde, además de buscar los mejores elementos exteriores, le daban especial importancia a la distribución interior. El objetivo es conseguir la energía vital o CHI (aire, aliento) a través de una buena distribución de todos los muebles, colores, materiales y objetos de decoración que favorezcan nuestra vida.
Mover muebles, ya sea en el salón, dormitorio, o cualquier sitio de la casa, responde a una necesidad de cambio, y no hablamos de cambio de sitio, sino cambio en nuestra mente, en nuestro interior. Los principios del Feng Shui buscan la armonía en todos los espacios donde vivimos. Deshacerte de lo que no necesitas, vaciar y limpiar, es el punto de partida para que la energía fluya correctamente.
Sencillez y minimalismo
Cuantos menos muebles y objetos que absorban la energía y capten la atención mejor para hacer un lugar más armonioso. En tu salón, da prioridad a la mesa y al sofá como objetos más importante de este espacio, así cómo la cama será el principal de la habitación.
La entrada, una experiencia agradable
Es el primer contacto visual que vamos a tener nada más pisar nuestra casa, tanto nosotros como las personas que nos visiten. Un aparador, un espejo, una planta o un cuadro… cualquier objeto que nos transmita tranquilidad y calma y que se traduzca en una sensación agradable, es bienvenido a nuestro hogar.
Espejos y planta, energía para el alma
Colocados estratégicamente añaden luz a los espacios, naturalidad y amplitud. A su vez, son catalizadores de energía positiva, esa que siempre buscamos para estar en equilibrio y armonía con nosotros mismos.
El dormitorio como canalizador del sueño
Para el Feng Shui el dormitorio es el ambiente más importante, donde nos sentimos más vulnerables a las energías del entorno cuando dormimos. Por eso debemos prestan atención a la orientación de la cama para que genere un flujo óptimo de energías. La alineación con la ventana, paredes y puerta tiene un especial significa.
A partir de estas simples indicaciones, puedes empezar a reubicar los muebles y objetos de tu casa para hacer de esta un lugar más placentero donde las energías positivas fluyan por todos los rincones. Unos toques a la distribución de tu hogar…. y deja paso al flujo de buenas vibraciones.